Introducción
El cabello tiene la función principal de proteger al cuero cabelludo de los efectos nocivos de la radiación UV y el calor incidente. Además, desde tiempo de los romanos, el cabello ha sido considerado un atributo de belleza, siendo relacionado además con la salud y juventud de las personas.
Por ello, es necesario recuperar pelo y mantener una buena salud capilar y con esto no nos referimos únicamente al uso de productos químicos de forma aleatoria y sin conocimiento, sino al proceso completo de conocer qué tipo de cabello es el nuestro y que producto le conviene o no.
En ocasiones, unos simples cuidados acaban siendo insuficientes y es necesaria una intervención quirúrgica o estética, como es el caso de algunas celebridades con implante capilar.
Todos los seres humanos no tenemos el mismo tipo de cabello. El pelo es una estructura de queratina formado por diversas capas que se diferencian en su forma y organización. Dependiendo de la estructura que tenga cada una de estas capas y su capacidad de reaccionar a los ácidos grasos del cuero cabelludo, un cabello será de un tipo u otro.
A continuación, enumeramos los distintos tipos de cabello de acuerdo a su estructura e hidratación. Además, recomendamos un par de trucos para recuperar pelo y mantener sano cada tipo de cabello y así evitar el desarrollo de alopecia y otras enfermedades del cuero cabelludo.
Tipos de cabello según su estructura
Desde el centro hacia afuera, el pelo está formado por tres capas: la medula, la corteza y la cutícula. La médula capilar puede o no estar presente en cada fibra capilar y representa una región sin una estructura definida. A su alrededor se encuentra la corteza, la capa más gruesa de la fibra capilar y la responsable de otorgarle sus propiedades de fuerza e hidratación. Además, es en la corteza donde se encuentra la melanina, el pigmento encargado de darle color al cabello. Finalmente, la cutícula cubre toda la fibra capilar, es la responsable de proteger al cabello del daño ambiental y de mantenerlo limpio y lubricado.
Dos cosas determinan la forma que tendrá la fibra capilar y por tanto el cabello: La forma del folículo capilar que a su vez da forma a la corteza del pelo y las interacciones formadas por las moléculas de queratina entre sí. Por lo tanto, esto da origen a dos tipos de cabello principalmente: Cabello liso y cabello con ondas. Este último, dependiendo de la forma de las ondas se sub clasifica en cabello ondulado, cabello rizado y cabello muy rizado.
Cabello liso
El cabello liso, se caracteriza a simple vista por no tener ondulaciones. Si se observa microscópicamente, puede notarse que la forma de su corteza es redondeada. Dicha estructura le permite crecer uniformemente y además caer en todas las direcciones en la superficie del cuero cabelludo. Además, las interacciones entre las moléculas de queratina son rectas, formando una estructura similar a una escalera.
Debido a la estructura del cabello liso, los ácidos grasos del cuero cabelludo tienen mayor facilidad para distribuirse uniformemente desde la base hasta la punta de la fibra capilar. Por lo tanto, a menudo el cabello liso es más brillante y más hidratado.
Trucos para el cuidado del cabello liso
El acceso que tiene el cabello liso a los productos del cuero cabelludo es una de las principales ventajas de su cuidado. Sin embargo, esto a menudo trae como consecuencia una pérdida importante de cuerpo y volumen.
El cabello liso suele estar bien humectado, por lo que no es necesario excederse con los acondicionadores o las mascarillas. Es más, pueden contribuir al daño y perdida de volumen, tornándolo grasiento y predisponiéndolo a infecciones y mal aspecto estético.
Por lo tanto, para mantener su cuidado procura comprar champú y acondicionador por separado, de esta forma puedes evitar tener un exceso de humectación. Existen champús que ayudan a dar volumen, sin embargo, es necesario que no sean tan grasosos porque pueden, en el cabello liso, dar un efecto contrario y no deseado.
El cabello liso por su estructura tiende a ensuciarse más rápido y a ser dañado con mucha facilidad. Por lo que se recomienda lavarlo frecuentemente con productos poco humectantes y realizar visitas periódicas al estilista.
Cabello con ondas
El cabello con ondas, se caracteriza por presentar ondulaciones. Estas ondulaciones son consecuencia de la forma del folículo capilar, el cual es curvo y hace que la fibra capilar crezca de forma asimétrica y encorvada. Además, a diferencia del cabello liso, las interacciones entre las moléculas de queratina ocurren de forma diagonal por lo que esto contribuye al enroscamiento del cabello.
Existen tres tipos de cabello con onda: el cabello ondulado, el cabello rizado y el cabello muy rizado. La principal diferencia entre ellos es el tamaño y estrechez de las curvas que forman la fibra capilar.
El cabello ondulado presentar ondulaciones con forma de “S” no compactas. Este tipo de cabello guarda similitud con el cabello liso ya que a menudo estas ondulaciones se forman en la punta del cabello manteniendo liso el resto de él.
El cabello rizado por su parte, presenta ondas bastante pronunciadas que forman bucles de compactación variable. Estos bucles se originan desde la base del cuero cabelludo y se extienden a lo largo de toda la fibra capilar.
El cabello muy rizado, como su nombre lo indica es el que presenta las ondulaciones más estrechas y compactas. Estos bucles que se forman son mucho más pequeños y comprimidos y se forman desde la base a la punta del pelo, cayendo en forma de capas desde la frente a la base del cuello.